Cuando Nikolaï Garin-Mikhaïlovski viajó hasta Corea en 1898 quedó seducido por la bondad y el candor del pueblo coreano, al que describe como honesto, noble, inteligente y cultivado. Transcribió en sus cuadernos una centena de cuentos tradicionales, tal como le habían sido recitados y traducidos por sus ayudantes coreanos durante su expedición. Uno de esos cuadernos se perdió durante la marcha, así que fueron sesenta y cuatro cuentos los que aparecieron en 1903 junto a los informes oficiales, etnográficos y cartográficos. Se trataba de la primera publicación en occidente sobre aquella literatura y la primera que se emprendía con tal amplitud. Serge Persky (1870-1938), traductor de Andreïev y de Gorki, presentó en 1925 al público francés veinte de esos sesenta y cuatro cuentos. El ilustrador Ju Péon es la transcripción fonética de Xu Beihong (1895-1953), uno de los más célebres pintores chinos del siglo XX, conocido en particular por sus representaciones de caballos.