Siento la presión de la competición. Sólo quiero ganar, es mi obsesión, y para ello utilizo todos los elementos a mi alcance´. Drazen Petrovic. Amado y odiado con la misma intensidad, Drazen Petrovic ha terminado siendo más que un simple jugador de baloncesto. Su presencia en la cancha, sus provocaciones continuas y su arrebatadora personalidad le convirtieron pronto en un líder. Los avatares de su vida deportiva y su prematura muerte, cuando estaba en el máximo apogeo de su vida deportiva, triunfando en los Nets, hacen que hoy en día su recuerdo forme parte de la leyenda.