Mi poesía no habla de flores ni viento,
Mi poesía habla de muerte,
de odio, de amor y de sexo.
La vida al final es esto.
Ana Casado
Te invito a que olvides tus prejuicios, si los tienes, y te dejes fluir entre las palabras, los versos, el desgarro y el sentimiento. No pretendo gustar a todo el mundo, ni creo que deba ser ese el objetivo de ningún autor, mucho menos de poesía. Mis disculpas si algún lector se siente ofendido por algo de lo que lee. Las opiniones son variadas y el impulso que te lleva a escribir, por ser impulso, es incontrolable.
Espero que disfrutéis de estos versos anárquicos y descontrolados en su técnica. Esa libertad es para mí un valor preciado, y por lo tanto, bienvenida sea.
Pasen y lean…