La psicología interpersonal se toma en serio un principio de sentido común: no hay que intervenir en una relación desde fuera. Y quien lo haga quizá resuelva un problema, pero también corre el riesgo de abocar la vida de pareja a una experiencia de dolorosa soledad. Es cierto que en una relación tan compleja como la de marido y mujer, cuyas dificultades no suelen ser en absoluto extraordinarias, el consejo más apropiado es: ´Mejor que os arregléis entre vosotros´. No obstante, y frente a los grandes desafíos a los que se enfrentan hoy las familias, conviene evitar la pura teoría y considerar cada situación particular. ´Maridos y mujeres´ pueden estar tranquilos. En estas páginas se hablará de ellos y para ellos pero sin entrometerse más de la cuenta.