XAVIER BARÓ I QUERALT / ALEIXANDRE COELLO DE LA ROSA (EDS.)
Edición crítica de la Relación de la vida del devotísimo hijo de María Santísima y dichoso mártir padre Luis de Medina de la Compañía de Jesús, por el padre Francisco García (Madrid, 1673). En 1668, un grupo de jesuitas españoles, dirigidos por el burgalés Diego Luis de San Vitores (1627-1672), iniciaron la evangelización de las islas de los Ladrones (luego, islas Marianas), contando con el apoyo financiero de la Monarquía Hispánica de Felipe IV. El contacto entre los religiosos españoles y los indígenas chamorri constituye un caso especialmente relevante, ya que se trata de una evangelización tardía y violenta que tuvo lugar en los confines del imperio hispánico. En aquellas lejanas islas del Pacífico muchos misioneros jesuitas, como el padre andaluz Luis de Medina (1637-1670), se convirtieron en mártires del catolicismo tridentino.