En 1933, don Antonio Maura se quejaba, en uno de sus discursos, de la situación en que se encontraba España. "De la Constitución -decía- no quedan en pie ni un artículo esencial. Por no cumplirse, no se cumple ni la ley de Defensa de la República, porque los gobernantes rompen el molde y llevan la ley donde les da la gana. Hay una manigua de legislación social para cometer arbitrariedades". El autor ha tomado la palabra "Manigua" con el sentido que le da Maura: "Mezcla desordenada de algo". Este libro tiene algo de desorden. No por ello pierde su interés, y los lectores encontrarán en él divertimento al recordar episodios de la Historia, algunos olvidados.
