Pocos libros habrá en la historia literaria tan emotivos en recuerdo de una madre como éste del célebre creador de Peter Pan. Por lo demás, la obra está imbuida de un constante humor entrañable debido a la personalidad fascinante de esa Margaret Ogilvy, típica y sencilla matrona escocesa con una viva inteligencia natural que alimentó la imaginación de su hijo.