Este libro constituye una estudio completo de la obra del escultor Miguel García Delgado (GEA), máximo representante de la figuración naturalista avanzada y culta en la ciudad de Sevilla en el periodo comprendido entre 1970 y 2012. La singularidad del escultor y el carácter avanzado de su obra desde parámetros conceptuales que lo relacionaron con las Vanguardias y la capacidad de asimilación de estímulos de la Antigüedad Clásica, la doble identidad barroca y los distintos enfoques primitivos vanguardistas lo convirtieron en el gran referente escultórico de la Postmodernidad en esta ciudad. Hombre reservado y celoso guardián de su intimidad, su obra se proyecta en una dimensión estética que trasciende lo cotidiano, lo literario, lo anecdótico propio de etapas anteriores de la escultura sevillana o de su vida diaria.