La muy leal y noble Villa de Orculota del Condado sirve de escenario para emprender un periplo por los principales hitos que han ido forjando esa realidad de lo que llamamos España: la romanización, la llegada del cristianismo, la Reconquista, el descubrimiento de América, el Siglo de Oro, la Guerra de la Independencia. . . De la mano de Orculota contemplaremos las peripecias de un sinfín de personajes que nos trasladarán de época en época. Así, nos toparemos con el caudillo de una tribu local, una más de entre tantos pueblos primitivos cuya tozudez combativa provocó que los romanos tardaran la friolera de doscientos años en conquistar Hispania; con testigos directos de los siete Varones Apostólicos en su afán por extender la Palabra de Jesús por toda la Península Ibérica; con señores medievales capaces de protagonizar aquella colosal gesta que fue la lucha contra la morisma invasora; con mercaderes foráneos que vislumbraron desde la distancia las posibilidades de negocio que abría el Nuevo Mundo; con moradores de enigmáticas viviendas que modelaron nuestro más cándido idealismo patrio; con héroes anónimos que mantuvieron encendida la llama de la libertad nacional frente al empuje de las hordas napoleónicas; o con algún que otro bienintencionado que llegó tarde al café para todos. En un momento que la Historia de España constantemente denostada y tergiversada desde los mismos poderes públicos que deberían promoverla con orgullo y objetividad, Pues nada, aquí estamos se alza para ilustrar-desde la modestia de una novela-algunos de los capítulos más brillantes por los que ha surcado nuestra milenaria Nación.
