Hay un momento que nunca olvidaremos, cuando decidió rememorar en la semifinal de la Eurocopa de Ucrania-Polonia el disparo de Panenka e hizo enmudecer al mundo durante unos segundos. En la grada, mientras tanto, su madre, Paqui, no podía más y profetizó antes de lanzarlo: "Va a hacer algo grande. A que lo tira de paradiña". Dicho y hecho. Paqui tomó a la niña de Pepe Reina en brazos: "Niña, me vas a dar suerte, seguro que lo va a marcar". Ramos se la jugó, marcó y Paqui gritó de pie en la tribuna: "Viva la madre que te parió". A partir de ese momento, su hijo se elevó a la categoría de mito.