En numerosas ocasiones no somos capaces de ver nuestro talento porque no buscamos donde debemos?. Luigi, María, Piero, Enrique, Marcos, Arturo y Alejandro hacen un viaje hasta sí mismos y consiguen recuperar su esencia, sus pasiones, sus sueños? Y desde ese momento todo fluye de una forma mucho más fácil. Como dice el Padre Ángel, fundador y presidente de Mensajeros de la Paz, en el epílogo del libro: ?Pero entonces aparece el talento: a través del esfuerzo de escapar del fracaso, de poner fin a la tristeza, de mirar a los demás para descubrirnos a nosotros mismos. De creer y luchar para lograr?.