´Mi padre, mi madre y mi hermano han tenido los ojos cerrados todo el tiempo pero, a lo mejor, ellos tampoco dormían (puede que mi hermano sí: él todavía es pequeño); mi padre y mi madre no habrán querido mirar por el puente porque es de noche y no se ve nada. Cuando el barco ha salido de Orán el mar se ha hecho oscuro y también el cielo, todo a la vez. Se oyó una sirena, boom! Nos empezaron a temblar los pies, y entonces pareció como si una muralla negra rodeara el barco y a los que estábamos dentro, y todo lo que había antes desapareció. Yano podríamos escapar, aunque quisiérarnos.´ Yenia Camacho Samper, hija de Marcelino Camacho y Josefina Samper, escribe estos relatos basados en una parte de su familia.
