Los caminos del conocimiento, a pesar de su número, se resumen en tres clases:
- Uno de ellos es el camino de los maestros piadosos que practican el ayuno, la oración, salmodian el Corán, la peregrinación, la lucha espiritual y otras actividades externas. Es el camino de la devoción.
A los que llegan al término de este camino les lleva un tiempo muy largo.
- El segundo es el camino de los maestros del combate y de los ejercicios espirituales, con los que aspiran a transformar su disposición interior. Es el camino de los justos.
- El tercero es el camino de los que se dirigen a Dios y se elevan por Dios. Es el camino de los audaces, los que pertenecen a la gente del amor y viajan en el arrebato espiritual.
El contenido de este texto es, básicamente, un conjunto de términos de referencia que nos puede ayudar a practicar este sendero en su formulación actualizada para Occidente.