El fantasma (1907) es una novela de intriga que mantiene en vilo la atención del lector y que, sin ser una obra estrictamente fantástica, sobrecoge y altera el sentido de la realidad como sucede con las obras maestras del fantastique. El ambiente donde se desarrolla la novela es el mundo de la más selecta y sofisticada sociedad. Una atmósfera wildeana de high class londinense donde no falta una prima donna de ensueño magistralmente dibujada por el novelista.