JOAQUÍN ÁLVAREZ BARRIENTOS (ED.)
Presentación.
- Globalización y folklore. Nuevos espacios de comunicación en la cultura popular.
- La fiesta como espacio literario.
- La calle como teatro: las representaciones en la sierra de Francia (Salamanca), siglos XVI a XX.
- El libro: la colección de poetas castellanos (1786-1798).
- Sociabilidad literaria: tertulias y cafés en el siglo XVIII.
- Salones y teatros de sociedad en el siglo XIX.
- Escenarios privados: el Teatro Ventura.
- El espacio de la intimidad. Juan Valera, el escritor en sus cartas.
- El espacio imaginario en la comunicación dramática.
Este volumen reúne los resultados del Seminario Espacios de la comunicación literaria, celebrado entre los meses de abril y mayo de 2000 en el Instituto de Lengua Española del CSIC. El interés de la reunión se centraba en abordar desde diferentes puntos de vista ese lugar que queda entre el autor y el receptor de la obra literaria, en diferentes campos, épocas y géneros. De ahí que se pase, por ejemplo, de estudiar el teatro como espacio urbano y familiar, al rural y abierto; del libro como ¿lugar¿ de comunicación, a los recintos donde se dio la relación entre los que se dedicaban a escribir ¿tertulias, cafés, salones¿; de los espacios imaginarios a los reales de la fiesta; de la carta en su multiplicidad de utilidades al marco de comunicación que presenta Internet. Encontrará el lector un acercamiento al entorno y a los contextos en que se dio y se da la comunicación literaria: calles, plazas, retablos, periódicos, pantallas de ordenadores, tertulias, cafés, salones, gabinetes de lectura, teatros, etc. La de este libro es una propuesta histórico-literaria que tiene en cuenta tanto el medio urbano como el rural, el espacio público como el privado, lo popular y lo oculto, los medios tradicionales de comunicación y los que no lo son tanto. De este modo se atiende a los espacios comunicativos propios de lo oral, de lo escrito y de aquellos en los que prevalece la dimensión visual. En todos los trabajos, aunque en diferentes medidas, se asiste al fenómeno de la transformación del espacio al ser sometido a interferencias literarias. El espacio, que acaba siendo polivalente, aunque estuviera destinado a un uso previo concreto, se teatraliza, y un entorno ¿real¿, empleado para algo cotidiano, acaba siendo también el espacio de la ficción. Estas modificaciones espaciales, por otro lado, pueden entenderse como modos de apropiación del entorno, que se llena de significados nuevos superpuestos. No se trataba tanto de hacer una poética de los espacios cuanto de acercarse a los espacios diarios que todos compartimos y observar cómo ponían de manifiesto esa nueva dimensión, que permanece oculta en el transcurrir de la vida cotidiana. Estudiarla y ver de qué manera ese entorno intervenía en nuestro acercamiento a la obra literaria (a la obra de arte) era el objetivo propuesto.
