MARIA CECILIA CAVALLONE, WUJI HOUSE
La mayoría de los héroes que conocemos son seres extraordinarios con poderes mágicos y una capa ondeando en sus hombros. Pero también existen héroes de carne y hueso, tan humanos como tú y como yo, que algunas veces se equivocan y otras aciertan a lo grande.
En la época en la que nació Florence Nightingale, los hospitales eran lugares sucios, donde trabajaban personas que no sabían casi nada de medicina ni de cómo tratar a los pacientes. Con esfuerzo y valentía, Florence se convirtió en enfermera profesional, y se dio cuenta de que muchísimas enfermedades podían prevenirse si se mejoraban las condiciones higiénicas de los enfermos y de los centros sanitarios.