No existen obras destinadas a la exposición particularizada y exclusiva de la vida de Abraham, el primer patriarca, considerado el fundador del pueblo israelita, que es conjuntamente reverenciado en el judaísmo, cristianismo y también en el Islam. Esta obra aporta algunas novedades, porque por primera vez se analizan detalladamente cada uno de los hechos en que intervino Abraham, siguiendo escrupulosamente el orden establecido en los capítulos del Génesis. Además, se expone también el contenido y finalidad de cada una de las promesas que le hizo Yahvé, que tardaron decenas de años en cumplirse. Asimismo también se analizan las virtudes del patriarca, lo que constituye un hecho inédito en la investigación bíblica.