Paul Valéry analiza las facultades humanas del conocer y del crear, a través de la figura de ese “genio universalö. “Leonardo es el maestro de los rostros, de las anatomías, de las máquinas. Sabe con qué se hace una sonrisa; puede ponerla en la fachada de una casa, en los repliegues de un jardín; desmelena y ondula los filamentos de las aguas, las lenguas del fuego. . .ö