El imposible pero plausible encuentro entre el romanticismo pleno de la poetisa Carolina Coronado y el decadentismo del pintor Antonio Juez se funden en este relato gráfico ambientado en un Badajoz onírico. La boca del lobo es un poético y original relato plasmado visualmente en un estilo expresionista en el que se actualiza el profundo y sintético claroscuro de maestros como Alberto Breccia o Didier Comés.