Los peces del duelo son el estímulo que nos golpea hacia la aceptación de las cosas dadas bajo el determinismo oculto entre los perfiles umbrosos de la vida. Cuando agonizan los peces curvan sus cuerpos y abren sus agallas en una acción que juzgamos desesperada. Como desesperado es el poema y su manifestación a grito herido por desdeñar la lucidez que la experiencia nos ofrece, en contra de la inicua ilusión a la que el poeta se aferra. Maeve Ratón (Zamora 1979) cursa en la actualidad el grado de lengua y literatura, compatibilizando su maternidad con la dirección de una pequeña fábrica. Ha publicado dos poemarios con la editorial Celya y con el Instituto de estudios Bercianos. Este tercero es para ella el mejor y más maduro de los poemarios que ha escrito. Hasat que venga el siguiente, añadimos.