Vázquez Montalbán confesaba que las novelas policíacas basadas en el desvelamiento de un enigma eran poco más que un crucigrama en cuya resolución se implicaba al lector. Susana Martínez, mucho más ambiciosa, se nos presenta como una fecunda escritora narrativa pluridimensional, comprometida con la realidad social de su tiempo, la situación de la mujer, las desigualdades sociales, la violencia indiscriminada, el poder y la dominación espurios. Que sus palabras siembren semillas de solidaridad y empatía para construir poco a poco una sociedad mejor. Se nos presenta la segunda edición de la obra.