Con humor, el autor ha querido cuestionar desde el título la naturaleza de esta colección de brevedades, que son la quintaesencia de una amplia producción redactada como al descuido y a lo largo de los años. Constituyen un depurado ejercicio de condensación verbal, que acoge el poso de muchas lecturas y fija distraídas divagaciones. Del mismo modo que abunda en ellas el juego de palabras y la actualización de fórmulas clásicas, también se trasparenta un escepticismo jovial y se levanta una barrera frente a los lugares comunes. Y en ocasiones, destella en estas páginas una verdad irracional: ´Un poema es una canción / que se ha quedado sola´. En lógica, Non Sequitur (en latín ´no se sigue´) es un argumento cuya conclusión no se deduce de las premisas. Y en sentido amplio, cualquier razonamiento inconsecuente.