En el Madrid de finales del siglo XIX, coinciden en la Pensión Flora nada menos que Unamuno, Valle Inclán, Pío Baroja, Antonio Machado y Azorín.
Todos son todavía jóvenes, pero comienzan ya a despuntar en los círculos literarios. Viajan a la capital cada uno desde un punto de España para contrastar opiniones, conseguir contactos y no perder detalle de todo lo que sucede en un momento tan apasionante de la historia.
Pensión Flora es una chispeante obra teatral concebida como divertido experimento y homenaje a un tiempo dorado para la literatura española. Apuleyo Soto se da el gusto de reunir una especie de patrulla fantástica de héroes escritores con ganas de salvar el mundo y da al lector la oportunidad de imaginar como pudieron haber sido las conversaciones entre esos cinco genios, con sus bromas, desfases, consejos, celos y, como no, poesía.