Nuestra casa, de noche, puede darnos un poco de miedo, pero sigue siendo nuestra casa! Talía emprende una pequeña excursión nocturna en la que consigue ahuyentar a todos los monstruos de su imaginación. Una noche, la pequeña Talía se despierta y ya no puede volver a dormir. De la habitación de al lado de su dormitorio sale el resplandor de una luz. Socorro! ¿Serán los ojos de un monstruo? De noche, la casa siempre da un poco de miedo, pero Talía piensa: «Sólo es un poco de oscuridad». Entonces, decide levantarse y comprobar qué pasa. De habitación en habitación, va siguiendo todas las lucecitas de colores y asustando a los monstruos de su imaginación finalmente, incluso consigue tranquilizar a su mamá! Una historia sencilla y simpática para poder enfrentarse con serenidad al MIEDO A LA OSCURIDAD
