¿Secretario de San Ignacio? ¿Gobernante en la sombra? ¿Teólogo y divulgador en los inicios de la espiritualidad ignaciana? ¿Quién fue Juan Alfonso de Polanco? Formado en el seno de una familia de pudientes comerciantes burgaleses y tras una seria formación en París, decide ingresar en la Compañía de Jesús tras hacer los Ejercicios Espirituales en Roma (1541) con el Jesuita Diego Laínez; dejaba atrás un futuro prometedor como "scriptor apostolicus" en el Vaticano. Sus cualidades y dones naturales ofrecían un perfil muy adecuado para ser el perfecto secretario. Fue el hombre de confianza, "memoria y manos", de los tres primeros Generales de la Compañía de Jesús.