Después de más de dos décadas dedicado a la investigación del cine español de los años cuarenta, y de una desde la aparición de Un cinema herido. Los turbios años cuarenta en el cine español (1939-1950), José Luis Castro de Paz profundiza en la senda iniciada, matizando y completando el tan solo esbozado nuevo mapa del cine español posbélico que entonces proponía. El detenido y desprejuiciado análisis historiográfico y textual del cine de tan oscuro y conflictivo periodo demuestra la pervivencia, pese a todo, de variadas formulaciones fílmicas capaces de mantener vigente una corriente subterranea común que constituye su auténtico material genético y que le asegura el reconocimiento de su público y el engarce con una tradición cultural homogénea. Un cine posbélico, en fin, que pese a las descalificaciones de grueso trazo con las que continúa siendo despachado en demasiadas ocasiones, fue capaz de ofrecer operaciones de indiscutible altura estética, siempre extremadamente interesantes para los ojos del historiador.