Como acertadamente dice el profesor Jean Canavaggio en su prólogo, esta nos es la obra “de un erudito, sino el de un modesto aficionado, lector apasionado, desde su infancia…ö del Quijote. Desde esa perspectiva es como hay que juzgar el trabajo que, en consecuencia, va dirigida a un público no-especializado, si bien supone una guía de lectura muy minuciosa que, en definitiva, es lo que resulta tras el análisis capítulo a capítulo del libro por excelencias del “Príncipe de los Ingeniosö. El propio autor lo pone de manifiesto en su nota preliminar, demostrando su interés en llegar a aquellos que todavía no se han acercado a las páginas del Quijote o que, aun habiéndolo hecho, le han podido quedar lagunas por entender, de ahí que confiese que el lema del que se ha servido para llevar a cabo este trabajo ha sido “descomponer para comprenderö, con lo que ha pretendido desmenuzar la obra para comprenderla mejor. El libro se complementa con catorce Apéndices que, al no tener cabida en el análisis del “corpusö de la obra, facilitan al lector interesado el conocimiento de determinadas aspectos que vienen a complementar, sin duda, el inmenso trabajo del autor.
