Los líderes políticos de 2016 abandonan la Tierra, tras haberla convertido en un yermo radioactivo, y activan una colosal máquina capaz de enviarles a una versión alternativa de nuestro planeta en el año 1945. De este modo, ya tienen un nuevo mundo que corromper. El primer cómic de William Gibson, uno de los autores de ciencia ficción más importantes de todos los tiempos, nos traslada a una distopía de viajes en el tiempo.