Héroe es aquel que en el centro de su ser se debe a la realización de lo noble, es decir, que se consagra a un valor 'puro', no técnico. El héroe es un ‘hombre que se dispensa’ y no que recibe; es bondadoso por prodigalidad, dispuesto al sacrificio por los amigos y la comunidad: el héroe está en sus hechos.
El genio está en sus obras: es su individualidad la que se manifiesta en ellas; produce, de un modo insustituible, cosas ejemplares, bienes puramente espirituales de la cultura, que crea de manera exclusiva, penetrando en su ser interior y ampliando con ello nuestra visión del mundo.