Tim Blanning examina en este brillante libro cómo todo, desde el culto a lo romántico hasta la tecnología y los viajes, alimentó el inexorable crecimiento de la música en Occidente, convirtiéndola en el arte más dominante y ubicuo. Ésta es una historia fascinante de poder, mecenazgo, creatividad y genio que abarca cantantes de baladas, grandes compositores, leyendas del jazz y dioses del rock.