Las prisas nunca son buenas, y menos cuando tienes que dar un beso de buenas noches... Por eso, el beso de buenas noches del príncipe no consigue llegar a su destino, ¡y se escapa!, huye por la ventana y se esconde en el bosque.
Entonces, el rey envía a su mejor caballero a recuperar el beso para su hijo. Lo que el caballero no espera es que sea tan complicado cazar al beso errante, ni los peligros que deberá enfrentar para encontrarlo.