Partiendo de los profetas bíblicos hasta alcanzar a Sartre y Camus, Bloom establecerá un diálogo con sus "iguales", esto es: críticos ensayistas y demás visionarios como Montaigne, Pascal, Rousseau, (...), Nietzsche, Freud o Huxley. Veintiún retratos que son, al mismo tiempo, excelentes trabajos de crítica literaria de máxima altura.