FISIOGNOMÍA:

El rostro habla por sí mismo. Nos dice quién, cómo y qué somos. NOs explica de qué forma pensamos, desvela cómo estamos a punto de actuar y marca nuestro carácter básico. No es cierto que los ojos sean el espejo del alma; son una parte de ella que se asoma al mundo a través de la forma de nuestra nariz, de la boca y del óvalo de la cara. Y, por supuesto, también mediante la expresión general del rostro. La fisiognomía tiene por objeto analizar y estudiar cómo somos, mediante algo tan simple y a la vez personal como es nuestro rostro. A través de las páginas de esta obra el lector aprenderá a descubrir qué traduce su rostro y el de los demás. Descubrirá de una forma sencilla y muy fácil el antiguo y nobre arte de "leer la cara y su expresión".