«Las mujeres fang aprenden, decía mamá. Se ríen, lloran en voz alta de noche. Lloran en voz baja de día. Las mujeres fang llora cantando el mundo, lloran cantando sus vidas.» Dos hermanas, dos tribus, dos curanderías y un cadáver en la Malabo que baila el agosto del petróleo. En una casa del barrio popular de Elá Ngema yace muerta una «albina, medio albina, yo qué sé», como la conocen desde niña. La esperanza de la familia para atraer hombres ricos con su belleza y su piel clara ha sido asesinada por manos desconocidas. Vela el cuerpo su hermana mayor, «la del cerebro bañado de sabiduría blanca» que no respeta a nadie, que no busca hombres ni iglesias. Y a su alrededor chocan dos familias: el clan paterno y el materno, unidos y enfrentados por una trama de historias y deseos y por las tradiciones del pueblo fang. Trifonia Melibea Obono, con un estilo que combina la poesía, la alucinación y el costumbrismo, describe una larga noche de velatorio tradicional a través de los ojos de una mujer que aspira a conservar su libertad frente a quienes buscan en la tradición una excusa para someterla y justificar su propia corrupción.