No hace tanto tiempo, Eragon, no era más que un pobre muchacho que vivía en una granja y su dragona, Saphira, una piedra azul oculta en el bosque. Ahora, el destino de una civilización recae sobre sus hombros.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso.
Más información