La aparición de esta obra en 1992, hace justamente treinta años, fue un hito en la poesía española contemporánea. En sus páginas, la escritura a la vez memorable, hímnica y fragmentaria de Antonio Gamoneda ingresaba en un espacio de máxima intensidad y depuración expresivas, movida por una vivencia implacable del tiempo según la cual 'ayer y hoy son ya el mismo día en mi corazón'.