El primero de estos relatos, ´El año que murió Eduardo Benavente´ (en la portada del libro), con la muerte del mítico cantante punk español de fondo, nos transporta a aquellos años 80 en que una generación pasó de golpe de una infancia asfixiada por el autoritarismo a una libertad sin límites. Un puzzle generacional, lírico y nostálgico, de los que fuimos adolescentes en los 80.